domingo, 28 de febrero de 2010
Tengo varias oportunidades para hacer mi rutina quizá un poco más fácil. Varias opciones para facilitar muchísimo lo que hago y sin que mueva un dedo, literalmente hablando. Varias opciones para volverme una chica “fiacosa”, dependiendo de esas opciones y sin poder depender de mis movimientos que fueron bloqueados por ellas. Pero, sin motivos exactos y razonables, he estado evitando toda oportunidad que me lleve a ese punto. Claro que es totalmente tentador que se te presenten unas cuantas oportunidades de dejar el movimiento atrás, pero siempre siento un raro impulso a alejar todo aquello y dejar todo como está, exactamente sin modificar nada, sin volverme una persona “fiacosa” y seguir dependiendo de mis esfuerzos en movimientos.
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